El conjunto “Chapaco” celebró en patio ajeno el
título de campeón del Nacional B y su ascenso directo al fútbol profesional.
Hinchas y jugadores se fundieron en abrazos y lágrimas para celebrar el
acontecimiento. Literalmente los tarijeños pintaron el estadio Gilberto Parada
de blanco y celeste.
El más contento de la tarde fue Víctor Hugo
“Copito” Andrada, DT del Ciclón, que celebró junto a sus dirigidos por mucho más
al recibir las medallas y el trofeo de campeón que trajo hasta Montero la
dirigencia de la Asociación Nacional de Fútbol (ANF) para entregarle al
flamante campeón.
“Copito” tuvo la capacidad de conformar un equipo
compacto con gente experimentada y con juveniles que se fijaron el objetivo de
obtener el título, hicieron bien las cosas ahora disfrutan del éxito y sienten
tocar el cielo con las manos.
La tarde fue especial porque se festejó en “patio
ajeno” ante la impávida mirada de los pocos hinchas azucareros que se quedaron
estáticos mordiendo la bronca por el mal rendimiento del plantel rojo. No era
para menos esperaban una victoria como despedida. Finalmente no quedó otra que
aplaudir al mejor del torneo.
Ciclón vuelve al seno de la Liga después de veinte
años.
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